Plan urbanístico de renovación parque Zierbena

Hoy, los usos concentrados en el centro de la parcela se expanden y se diseminan con naturalidad por los 1000 m2que conforman la superficie de actuación.
El proyecto busca redistribuir las actividades de manera equilibrada, creando pequeños txokos diferenciados y adaptados a distintas edades, dispuestos sobre un eje longitudinal paralelo al
muro existente. Estos espacios de juego, independientes pero conectados, permiten evitar aglomeraciones y refuerzan la idea de un parque inclusivo, donde cada generación encuentra su rincón propio.
La propuesta se protege de la carretera, dando la espalda al tráfico y delimitando claramente la zona de juegos, de
modo que el parque se perciba como un refugio seguro. El mobiliario actual se sustituye y reorganiza, dotando al conjunto de una coherencia estética que dialoga con el nuevo ajardinamiento. Se introduce vegetación adaptada al clima
atlántico y a la cercanía del mar, integrada en maceteros de hormigón que funcionan como elementos de transición
entre naturaleza y diseño.


El muro perimetral de la parcela contigua, hoy dominante y rígido, se transforma mediante una “doble piel” que suaviza su presencia y lo convierte en un telón de fondo amable, integrando la plaza con una mayor calidad espacial. En el límite opuesto, la intervención se separa prudentemente de los semisótanos del edificio residencial, evitando posibles afecciones.
El corazón del proyecto lo constituye una pérgola que, más allá de ser refugio frente al sol o la lluvia, actúa como símbolo identitario. Con sus materiales y su situación estratégica, la pérgola define la esencia de la plaza, cosiendo las diferencias de cota y vinculando el espacio con el quiosco de información existente. Su diseño se inspira en la tradición marinera del municipio, evocando la estructura ligera pero firme de los aparejos de pesca, uniendo así memoria y contemporaneidad.
En suma, esta actuación no es solo una mejora funcional, sino un gesto poético hacia el pueblo de Zierbena: un lugar donde los niños juegan, los mayores conversan, y la comunidad entera se reconoce en un espacio renovado que respira mar, historia y futuro compartido.

